Estos cuencos, comúnmente conocidos como tazas de té chinas o cuencos de té, son una pieza fundamental en la cultura del té en China, especialmente en la ceremonia del té Gongfu. Se caracterizan por su diseño delicado y funcional, pensado para realzar la experiencia de degustar el té.

Características principales:

• Tamaño y Forma: Son pequeños y de poca capacidad, generalmente sin asas. color y el aroma del té. El tamaño reducido fomenta el consumo de pequeñas cantidades de té en varias rondas, permitiendo saborear la evolución del sabor en cada infusión.
• Interior Liso y Monocromático: El interior del cuenco suele ser liso y de un solo color, como blanco, celadón (un verde pálido) o tonos pastel. Esta superficie uniforme y de color claro tiene un propósito práctico: permite al bebedor admirar con claridad la tonalidad y la limpidez de la infusión.
• Exterior Decorado con Flores: La parte exterior es donde se encuentra la decoración principal. Las flores son un motivo muy común en la cerámica china, cada una con su propio simbolismo:
• Peonías: Símbolo de riqueza, prosperidad y honor.
• Flores de ciruelo: Representan la perseverancia y la belleza en la adversidad, ya que florecen en invierno.
• Crisantemos: Simbolizan la longevidad y la nobleza.
• Flores de loto: Asociadas con la pureza y la perfección espiritual.
• Camelias: Representan la unión y el afecto.

En resumen, estos pequeños cuencos son una combinación de estética y funcionalidad, diseñados para que cada sorbo de té sea un momento de apreciación sensorial y cultural. La belleza de sus flores exteriores contrasta con la sencillez de su interior, creando un objeto equilibrado y lleno de significado.